Torre de vigiláncia. Playa de Peñíscola (Castellón). |
Torre de Vigiláncia. Bosques de Soria. |
Ella miraba el cielo, preservando robles, corzos, fresnos. Oteaba el bosque espantando a Hefeso, Dios del fuego. Observaba, ojeaba, intentando percibir señales de humo. Él miraba el cielo, salvaguardando sueños de estío, pleiteando con Poseidón, Dios del mar y de las tormentas. Oteaba vientos, lluvias, vendavales. Construía castillos de arena, volaba comentas. Un tarde, mientras el fuego calcinaba el bosque y las olas arrasaban la playa, sus ojos colisionaron en el horizonte. Cosas del amor.
Fotos: © Xavier Blanco.
Me encantan esas dos torres tan distintas y tan lejanas que al final, en el medio de la catástrofe, se unen en una mirada. Muy bellas tus rapsodias.
ResponderEliminarUn abrazo.
¿Jugando con las distancias? Es muy bueno.
ResponderEliminarArenal dormido
ResponderEliminarQue desnuda te quedas con la ausencia
Tus amantes olvidada te dejan
Solo acariciada por las olas
Compañeras eternas de tus noches.
Tu piel cubierta de huellas
Con direcciones a infinito
Poco a poco barridas por el viento
Que te devuelve siempre la calma
Déjate ir, déjate ir
Triste, apagándote con el día
Déjate ir, déjate ir
Descansa arenal que estás dormido.
No oyes ya las voces infantiles
Ni sus manos te construyen castillos
Solo tu vieja amiga la gaviota
Descansa de su vuelo en tu suelo
Abandonada por tu amante el sol
Las estrellas te guiñan en lo alto
Te consuela la luna compañera
Cuando viste de luz tu geografía.
Déjate ir, déjate ir
Triste, apagándote con el día
Déjate ir, déjate ir
Descansa arenal que estás dormido.
Sara, gracias por pasar por aquí y comentar. Me gustaron esas dos torres, hice las fotos y al ponerlas una al lado de otra, casi me salió el texto sin pensar.
ResponderEliminarSaludos,
Montse,
ResponderEliminarSí, entre las dos torres hay muchos Kilómetros, desde las playas de Castellón a los montes de Soria. Me gustan esas torres desde las que puedes ver mas allá del horizonte.
Un abrazo.
Gorka,
ResponderEliminar>Vuelve a regalarnos un poema, un texto precioso, que se merece pasar a la portada del Caleidoscopio y ser compartido por todos. Un abrazo amigo, tengo ganas de volver a Barcelona y compartir con vosotros unas charlas y unas risas.