No preguntes qué puedes encontrar aquí, ni siquiera yo lo sé. Sea lo que sea se hallará entre el todo y la nada, entre el blanco y el negro, entre siempre y nunca. Ahí queda mucho espacio por llenar. Empecemos, sin demora, necesitaremos más de una vida para hacerlo.

martes, 9 de agosto de 2011

20 Cosas del amor.

Torre de vigiláncia. Playa de Peñíscola (Castellón).
Torre de Vigiláncia. Bosques de Soria.













Ella miraba el cielo, preservando robles, corzos, fresnos. Oteaba el bosque espantando  a Hefeso,   Dios del fuego. Observaba, ojeaba, intentando percibir señales de humo. Él miraba el cielo, salvaguardando sueños de estío, pleiteando con Poseidón, Dios del mar y de las tormentas. Oteaba vientos, lluvias, vendavales. Construía castillos de arena, volaba comentas. Un tarde, mientras el fuego calcinaba el bosque y las olas arrasaban la playa, sus ojos colisionaron en el horizonte. Cosas del amor.
Fotos: © Xavier Blanco. 

6 comentarios:

  1. Me encantan esas dos torres tan distintas y tan lejanas que al final, en el medio de la catástrofe, se unen en una mirada. Muy bellas tus rapsodias.
    Un abrazo.

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  2. ¿Jugando con las distancias? Es muy bueno.

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  3. Arenal dormido

    Que desnuda te quedas con la ausencia
    Tus amantes olvidada te dejan
    Solo acariciada por las olas
    Compañeras eternas de tus noches.

    Tu piel cubierta de huellas
    Con direcciones a infinito
    Poco a poco barridas por el viento
    Que te devuelve siempre la calma

    Déjate ir, déjate ir
    Triste, apagándote con el día
    Déjate ir, déjate ir
    Descansa arenal que estás dormido.

    No oyes ya las voces infantiles
    Ni sus manos te construyen castillos
    Solo tu vieja amiga la gaviota
    Descansa de su vuelo en tu suelo

    Abandonada por tu amante el sol
    Las estrellas te guiñan en lo alto
    Te consuela la luna compañera
    Cuando viste de luz tu geografía.

    Déjate ir, déjate ir
    Triste, apagándote con el día
    Déjate ir, déjate ir
    Descansa arenal que estás dormido.

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  4. Sara, gracias por pasar por aquí y comentar. Me gustaron esas dos torres, hice las fotos y al ponerlas una al lado de otra, casi me salió el texto sin pensar.
    Saludos,

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  5. Montse,
    Sí, entre las dos torres hay muchos Kilómetros, desde las playas de Castellón a los montes de Soria. Me gustan esas torres desde las que puedes ver mas allá del horizonte.
    Un abrazo.

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  6. Gorka,
    >Vuelve a regalarnos un poema, un texto precioso, que se merece pasar a la portada del Caleidoscopio y ser compartido por todos. Un abrazo amigo, tengo ganas de volver a Barcelona y compartir con vosotros unas charlas y unas risas.

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